Cada conductor debe encontrar ‘su’ posición al volante, adaptada a su anatomía y a su vehículo, para conducir relajado sin renunciar a la seguridad.
Tener bien configurado el puesto de conducción es fundamental para tener un mejor control de tu coche. Al fin y al cabo, es el puesto de mando y, si no está bien colocado, no podrás dar las órdenes precisas y el comportamiento del coche no será el deseable.
De poco sirve tener el coche más cómodo y seguro si la regulación del asiento del conductor está mal configurada. La posición de conducción es clave para la seguridad porque estarás cómodo, llegarás correctamente a todos los mandos y podrás reaccionar ante cualquier imprevisto con mejores garantías.
Cómo colocarte bien al volante en 10 pasos
Así que, antes de ponerte en marcha, asegúrate de que todo está a tu medida. Y si es necesario rectificar algún reglaje (respaldo, reposacabezas, retrovisor...), hazlo siempre con el vehículo detenido para evitar distracciones. En este sentido, la Dirección General de Tráfico ha publicado una ‘rutina’ de 10 puntos, para ayudarte a conducir de forma segura y cómoda:
1. Distancia. Busca la separación óptima respecto al volante y a los pedales. La banqueta debe quedar a una distancia que permita maniobrar con comodidad. Un truco: pisae el embrague a fondo, la pierna izquierda debe quedar ligeramente flexionada, no estirada.
2. Altura. Regula la banqueta hasta una altura que te permita una visibilidad frontal completa. Tus ojos, deben quedar a media altura del parabrisas, para ver hasta el final del capó delantero. ¡Cuida de no deshacer los ajustes previos de distancia!
3. Inclinación. El ajuste del respaldo es importante porque condiciona la movilidad de los brazos. La inclinación idónea es un poco más de 90º, de forma que pueda tocar la parte superior del volante con las muñecas, con la espalda apoyada en el respaldo.
4. Reposacabezas. Una vez sentados correctamente, regulamos el reposacabezas. El centro debe coincidir con la parte de atrás de su cabeza y ambos deben quedar alineados por arriba. Recuerda: el reposacabezas no sirve para dar comodidad, sino para amortiguar el movimiento de la cabeza en caso de impacto.
5. Volante. La altura y la profundidad adecuadas del volante permiten sujetarlo cómodamente, con los codos un poco flexionados, formando un ángulo de más de 90º. Además, cuando maniobremos, las rodillas nunca deben topar con él. Ni debe obstaculizar la visión del cuadro de instrumentos ni de la carretera.
6. Retrovisores. Ajustados asiento y volante, es turno de los retrovisores. Deben estar colocados de forma que ofrezcan una visión correcta de la vía sin tener que mover la cabeza. El retrovisor interior debe estar centrado en la luneta trasera. Los laterales, abiertos para cubrir un mayor ángulo, hasta dejar de ver el lateral del vehículo.
7. Manos. Sitúa las manos sobre el volante para tener capacidad de maniobra. Imaginando que el volante es la esfera de un reloj, agárralo en la posición de las ‘10:10’. Durante la conducción, mantén los brazos un poco flexionados, nunca tensos. Durante la marcha, evita cruzarlos al girar el volante.
8. Calzado. Para conducir el calzado debe ser cómodo, flexible, sujetar el pie y con buen tacto en los mandos para pisar los pedales con fuerza y precisión. Evita chanclas y sandalias, zapatos con tacón o rígidos. Asegúrate de que tus suelas están secas y limpias antes de conducir para no resbalar.
9. Ropa. La vestimenta también condiciona al conductor, ya sea en trayectos cortos o más prolongados. La abultada ropa de abrigo propia del invierno es poco recomendable ya que impide el correcto ajuste del cinturón de seguridad y le resta eficacia cuando entra en acción.
10. Cinturón. Con todos los ajustes completamente regulados a medida, haz ‘clic’ con su cinturón de seguridad, siempre antes de ponerte en movimiento. Dejarlo para después implica soltar una mano del volante, además de una distracción totalmente evitable. Y cuida de que todos tus acompañantes también se abrochan sus cinturones.
Además de estos consejos, mejora tu seguridad en carretera con un buen mantenimiento de tu vehículo. Y para darle los mejores cuidados, elige los profesionales de los talleres asociados a Asetra. Hazlo siempre que necesites realizar cualquier operación de mantenimiento o reparación en tu coche. Trabajamos desde siempre para ofrecerte el servicio honesto y de calidad que demandas.